Sin reparos, Elisa Carrió desconoció la represión y pronosticó que ganarán la votación
La diputada que pidió la suspensión de la sesión por el feroz accionar policial contra los manifestantes, habló de una violencia 'mala' o "la de ellos" en referencia a las protestas y otra violencia -la institucional, que pronunció como "la nuestra"- como si fuera la 'buena'. Da vergüenza sobre todo porque afuera del recinto volaban tiros, gases, palazos, motos y carros hidrantes, que claramente no representan el reclamo de la ciudadanía.
Además de menospreciar la evidente voluntad popular que salió a las calles contra un saqueo liso y llano contra los jubilados y augurar que "la semana que viene o la otra" el oficialismo ganaría la votación, Elisa Carrió se jactó como parte del Gobierno de no responder con violencia, mientras las fuerzas policiales y la gendarmería reprimían en los alrededores del Congreso.
La criminalización de la protesta social es una constante, la cacería posterior y el completamente desproporcionado operativo alrededor de la sede legislativa dan cuenta de que la diputada no es capaz de analizar objetivamente quién está realmente detrás de la generación de la violencia, la única que hay, la que parte del estado y oprime a los ciudadanos.