Repudian el silencio opositor ante las amenazas a la familia Massa: "Ni una voz de condena"
"El silencio como forma de convalidación de la violencia política nos traslada a las épocas más oscuras de la Argentina", advirtieron desde el Frente Renovador. El ministro de Economía recibió amenazas de muerte junto a su familia.
Frente a escalada de violencia que promueve la derecha en Argentina, con declaraciones y posturas antidemocráticas, y luego del intento de asesinato a la vicepresidenta Cristina Fernandez, el Frente Renovador realizó una fuerte advertencia por medio de un comunicado.
En el documento, desde el espacio que forma parte del Frente de Todos, repudiaron que por parte de la oposición no se eleve “ni una voz de condena” por el atentado contra Cristina Kirchner ni las amenazas a la familia Massa.
Desde su cuenta oficial de Twitter, alertaron: “Que la idea del "vale todo" no lleve a la Argentina a un mal lugar".
“Ni una voz de condena. Ni un solo mensaje de solidaridad o de condena. El silencio como convalidación de la violencia nos traslada a las épocas más oscuras de la Argentina”, reza el escrito.
Asimismo, los referentes del partido político pidieron: “Les exigimos a todas las fuerzas políticas que se expresen alrededor de estos temas”.
Además, pidieron que "el Poder Ejecutivo Nacional se involucre para que la violencia no sea la regla y se garantice la convivencia democrática”.
"'Algo habrán hecho' o 'el que calla otorga', son frases que perfectamente podrían caber para justificar", continuó el texto.
El comunicado del FR, apareció este lunes, ya que el sábado se conoció que los diez imputados en la causa que investiga las amenazas de muerte que recibió la familia del actual ministro de Economía en 2020 se reconocieron culpables y el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N°2 de San Isidro decidió que cumplan con la probation.
Además, se supo que la exsecretaria del diputado Gerardo Milman aceptó que borraron todos los mensajes de su celular vinculados al intento de homicidio de la vicepresidenta Cristina Kirchner, en una oficina de la presidenta del PRO, Patricia Bullrich.