Mientras en el país virual de Macri la recalificación de mercado emergente desata globos, en el país real las cosas no están nada bien. Los vecinos del conurbano pasaron de febrero a junio de considerar que los servicios eran "caros" a ser "imposibles de pagar". 

En febrero de 2018 el 70% la población consideraba que era "caro" o imposible de pagar" la tarifa pero apenas cuatro meses después el porcentual aumentó una proporción de casi el 10% y alcanzó al 70% de los consultados, consignó una nota del sitio Política Argentina. 


En el caso de la luz, en febrero menos del 69% respondía que eran “caras” o “imposibles de pagar con su ingreso”. Tres meses después, la misma pregunta arroja un incremento de 5 puntos porcentuales.  


En el caso del transporte público, en febrero el 12% de los residentes del AMBA reconocía que con su salario no podia pagar las nuevas tarifas. En junio el porcentaje se duplicó y hoy el 25% de los bonaerenses que viven en el Gran Buenos Aires no llegan a cubrir los aumentos.

El caso del agua también presenta el mismo desarrollo, el 17% consideraba no poder pagar la tarifa en febrero y en junio dicha percepción ya aumentó al 26%. Respecto al gas también hubo un deterioro importante, de 22% en febrero a 33% en junio.


Del estudio queda en claro que la zona más afectada por las tarifas y donde un mayor porcentual de bonaerenses no pueden afrontar el pago de las tarifas es en el Oste del conurbano bonaerense (La Matanza, Merlo, Moreno, Hurlinghan, Ituzaingó). Allí el 36% se considera incapaz de poder afrontar los aumentos.

(Fuente Política Argentina)