Preocupación por el decreto que le permite a Dietrich cerrar ramales: ¿Van por los trenes?
Trabajadores y habitantes de pueblos del interior por los que el tren dejó de pasar en el último tiempo por decisión del Gobierno están en vilo ante la nueva la nueva potestad del Ministerio de Transporte.
A través de un decreto, el presidente Mauricio Macri le transfirió al Ministerio de Transporte el poder de cerrar ramales ferroviarios y levantar vías y durmientes, lo que despertó una fuerte preocupación en trabajadores ferroviarios y habitantes de pequeños pueblos bonaerenses y de otras provincias donde el tren dejó de pasar en el último año y medio.
Desde la cartera argumentaron que se trata de un mecanismo que sólo procura aliviar trámites burocráticos, transfiriendo todo a la Administración de Infraestructuras Ferroviarias Sociedad del Estado, aunque en un contexto de ajuste permanente por parte del Gobierno, esta nueva decisión mantiene en vilo a miles de habitantes.
De esta manera, se acrecienta el temor por la vuelta del fatídico “ramal que para, ramal que cierra”, ya que ahora, el ministro Guillermo Dietrich podrá disponer el cierre de ramales aún activos, lo que resulta peligroso para varios trayectos en los que el ferrocarril dejó de transitar por decisión del Gobierno, como el caso de los ramales La Plata-Brandsen, de la línea Roca; o Puente Alsina-Aldo Bonzi, del Belgrano Sur.
Con la actual política ferroviaria concentrada exclusivamente en el área metropolitana, de acuerdo con Tiempo Argentino, hay varios servicios locales del interior del país que estarían en la mira. En Chaco, desde abril no funciona el servicio Puerto Vilelas-Puerto Tirol, y desde la semana pasada ocurre lo mismo con el trayecto Sáenz Peña-Chorotis.
Del mismo modo, el jefe de Gabinete Marcos Peña adelantó la suspensión del proyecto de extender el Tren del Valle, entre Río Negro y Neuquén; mientras que en la provincia de Entre Ríos, los servicios Paraná-Concepción del Uruguay y Basavilbaso-Villaguay dejaron de correr a principios de 2016.
Otros trayectos, suspendidos por diferentes motivos, son los servicios desde Constitución a Tandil, Bahía Blanca (vía Pringles) y 25 de Mayo; de Once a Carlos Casares, General Pico (vía Trenque Lauquen y vía Lincoln/Realicó) y Santa Rosa; y de Retiro a Rufino. Unos 40 pueblos esperan, ahora con temor, por su reactivación.