A Alberto Fernández no lo defiende nadie y se convirtió en el pararrayo de todas las críticas dentro y fuera del peronismo que, inexorablemente, desembocaron en su figura por el mal desempeño que tuvo en el gobierno.

Miguel Ángel Pichetto fue uno de los primeros críticos a su gestión -también lo es de la actual de Javier Milei- y pasado el tiempo la imagen que tiene de su administración no mejoró en nada.

No solo le cuestiona no haber resuelto los problemas con los que se encontró sino que también le endilga haber creado algunos otros que ni siquiera existían.