Perfil embiste contra Mariotto
El diario de Jorge Fontevecchia vuelven con su ataque contra el vicegobernador e impulsor de la Ley de Medios, Gabriel Mariotto.
Dado el pequeño revivir de la causa Ciccone (increíblemente, a través de un departamento vacío y un "talonario" de expensas olvidado), dudaron de seguir (En su columna de hoy, Fonte admite una vez más que no hay nada y desnuda crudamente las intenciones del periodismo independiente: "Podría Boudou terminar demostrando que actuó “conforme a derecho”.
Sin que haya pruebas que demuestren que hubiera procedido ilegalmente. Pero igualmente Boudou ya perdió. La opinión pública no precisa que esté documentada la conexión directa entre él y Vandenbroele para tener la convicción de que están conectados").
Pero ya hoy sábado (¿Fonte los hizo trabajar en Viernes Santo?) vuelven con su ataque contra el impulsor de la Ley de Medios (que Pagni dice que fracasó), Gabriel Mariotto.
"Luego de la compra de un piso de lujo Marbella en plena crisis de 2002, Gabriel Mariotto ingresó a la administración pública y desde allí logró multiplicar por once sus ingresos en ocho años del gobierno K. En 2003 declaró ingresos netos como subsecretario de Comunicación por $17.579 -junio a diciembre- y en 2011 ganó alrededor de $375.000.
En su última declaración jurada (2010) que presentó a la Oficina Anticorrupción (OA), el vicegobernador bonaerense aseguró ganar como titular la Autoridad de Aplicación de la Ley de Medios (AFSCA) $305.928. Si se aplica el aumento del 22,5% anual que decretó Cristina Fernández para sus funcionarios entre 2010 y 2012, el año pasado percibió unos $375.000.
Es más, Mariotto declaró cobrar más que la propia Presidenta en 2010. Cristina detalló un ingreso anual de $256.390 netos. En 2010, incluso, el ex titular del COMFER duplicó sus ingresos respecto a 2009 ($160.540 netos)".
Mientras se rearman con el caso Mariotto, tienen tiempo para presentar que el apoyo que recibió Boudou (a pesar de que decían que estaba solo) ahora está dividido. Es decir, la estrategia de siempre: si la realidad no te responde, por lo menos partila. Si hay mucho consenso (caso Malvinas, otro ejemplo) contrario a tu posición, presentalo dividido.
No pararán.