Patricia Bullrich intentó justificar el protocolo para la utilización de armas de fuego
La ministra de Seguridad habló en el noticiero de América y trató de explicar de manera muy vaga en qué circunstancias las fuerzas de seguridad podrán utilizar las armas de fuego. En 2010 la exministra de Seguridad, Nilda Garré, las prohibió luego de las muertes en la toma del predio en el Indoamericano.
El lunes se publicó en el Boletín Oficial la resolución y protocolo del ministerio de Seguridad para que las fuerzas de seguridad vuelvan a utilizar armas de fuego. Lo más alarmante de esta cuestión son dos puntos centrales donde organizaciones sociales y políticas critican fuertemente: la Policía podrá disparar sin dar la voz de alto y cuando crea que el presunto sospechoso está o no cometiendo un delito.
El protocolo oficializado este lunes autoriza a las fuerzas de seguridad a emplear armas de fuego en casi todas las situaciones de intervención frente a un hecho delictivo: en defensa propia, para impedir la comisión de un delito, para proceder a la detención o para impedir la fuga. Además, redefine de manera amplia y flexible los casos de peligro inminente.
Por ello, Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, habló en varios medios para tratar de explicar esta polémica resolución que ya entró en vigencia y entre otras cosas explicó que el arma es para cuidar a los ciudadanos indefensos.
El 8 de marzo de este año, en Tucumán, dos policías asesinaron a un menor de 11 años, Facundo Burgos, que viajaba en una moto con otro menor de 14 años. Según los efectivos los "confundieron con delincuentes".
En el último informe de la CORREPI (Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional), de diciembre de 2017, en dos años del gobierno de Cambiemos con Bullrich al frente del ministerio de Seguridad, tuvo el mayor pico represivo desde la vuelta de la democracia. En 2016 "registrábamos 241 casos de ese año, sumados a 18 del 11 al 31 de diciembre de 2015, totalizaban 259 para la gestión Cambiemos".
En relación al 2017 incorporaron "502 casos, totalizando 6.462 contra 4.960 que tenían registrado y lo que se desprende de este trabajo es que de esos casos: "21 ocurrieron entre 2005 y 2014;19 ocurrieron en 2015, totalizando 300 casos en el año. 200 ocurrieron en 2016, que se convierte en el año récord de la represión estatal en Argentina, con 441 casos. 258 ocurrieron en lo que va de 2017, cifra que comparada con el parcial que teníamos a esta altura del año anterior promete que éste año superará a 2016. Entre el 10 y el 31 de diciembre de 2015, tenemos registrados 26 casos. Si los sumamos a los 441 de 2016 y 258 de 2017, tenemos que, en los 722 días de gobierno de la Alianza Cambiemos, el aparato represivo estatal mató 725 personas."
Fuente: CORREPI