Moreau, tras el polémico fallo a favor de Robles, Rosatti y D'Alessandro: ''Tenemos una Justicia a la carta''
El diputado del Frente de Todos cuestionó con dureza la decisión del juez Sebastián Ramos que archivó la denuncia contra el vocero del presidente de la Corte, Horacio Rosatti, por sus chats con el ministro de Seguridad y Justicia porteño Marcelo D'Alessandro.
Sebastián Ramos decidió archivar la denuncia contra Silvio Robles, el vocero y mano derecha del titular de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, por sus chats con el ministro de Seguridad y Justicia porteño, Marcelo D'Alessandro.
Una de las reacciones más duras fue la de Leopoldo Moreau, que consideró que que el fallo "confirma que en la Argentina tenemos una Justicia a la carta".
En diálogo con C5N, el diputado del Frente de Todos contó: “La denuncia fue presentada por un abogado llamado (Gastón) Marano, el mismo que defiende a la banda de los copitos en el intento de asesinato a Cristina Kirchner. Inmediatamente interviene el inefable fiscal Stornelli, que dice que la prueba es ilegal y por lo tanto no hay delito. Y como un rayo, el juez Ramos archivó la causa”.
"Esto se da de narices con lo que fallaron en otras causas, por eso digo que estamos frente a una Justicia a la carta, donde hay dos Códigos Penales y dos Códigos de Procedimiento: uno el que le aplican al kirchnerismo y al movimiento popular argentino en su conjunto, y otro el que le aplican al macrismo y a sus cómplices de la mafia judicial", señaló Moreau.
En ese sentido, recordó que la causa del Memorándum de Entendimiento con Irán, que estaba cerrada, fue reabierta a partir de una conversación entre el excanciller Héctor Timerman y el expresidente de la AMIA Guillermo Borger, la cual fue obtenida de manera clandestina, aunque avalada en diferentes instancias por el fallecido juez Claudio Bonadio y los camaristas Gustavo Hornos y Mariano Borinsky.
El radical concluyó: “Queda un solo camino, que es acudir a los organismos internacionales y a los tribunales internacionales. La Justicia en la Argentina está obturada, clausurada para quienes no piensan como piensan los grupos dominantes y quienes no forman parte de la mafia judicial”.