El gobierno está en la cuerda floja por sus políticas inhumanas, y más aún luego de conocer la existencia de millones de alimentos guardados en galpones, que no fueron entregados a los comedores comunitarios. 

Recordemos que los comedores vienen reclamando hace meses la falta de alimentos para afrontar el hambre en gran parte del pueblo argentino, y el Gobierno obviamente jamás dio respuesta. 

Pero, tras la presión popular sobre este tema, el gobierno libertario salió a excusarse con que esos alimentos estaban siendo guardados para “situaciones de emergencia”.

Poco les duró la mentira, ya que el propio intendente de Paso de los Libres, Martín Ascúa, hablo en declaraciones radiales con Ariel Lijalad, y lo desmintió completamente. 

Hace exactamente 11 días, el intendente le reclamó a la ministra de Capital Humano de la Nación por ayuda para las más de 200 familias inundadas en la región, que tuvieron que ser desplazadas. 

Ampliar contenido
X de ari lijalad

Entre los pedidos de abrigo y colchones, también se encontraba el reclamo urgente de alimentos para estas familias. Pero, el intendente no solo no obtuvo lo que requería, sino que ni siquiera tuvo respuesta por parte de Sandra Pettovello. 

De esta manera el gobierno quedó expuesto con otro engaño más, que no puede ser interpretado más que una política inhumana y sin ningún tipo de empatía por los más necesitados.