Que los gobiernos no mantengan el mismo nivel de popularidad del comienzo del mandato es esperable -aunque algunos en los primeros meses logran aumentarlo, como recientemente Mauricio Macri y Alberto Fernández, quienes crecieron en el incio de sus períodos presidenciales- pero en el caso de La Libertad Avanza marca una bajada en tobogán.

Los mismos analistas que se sorprendían de que a pesar de realizar el mayor ajuste de la historia siguiera teniendo el mismo respaldo, ya ven otra cosa.

La encuestadora Zuban Córdoba, una de las más reconocidas, viene registrando una caída de la imagen presidencial sostenida en los últimos meses.

Lo destacado del último informe es que el descenso está marcado principalmente por la fuga de sus propios votantes, que le van soltando la mano.