Es claro que el hombre necesitaba “limpiar” la imagen de su local y a LN+ le servía que él dijera que la agresora era la compañera de Artemio López y no el fiscal como contó el analista político.

Pero el discurso de Rosat es algo extraño. Primero porque aseguró que él estaba en la cocina ya que además de ser el dueño es el cocinero del lugar pero al parecer aún estando en la cocina y concentrado en su trabajo pudo contar al detalle la supuesta discusión.

Pero esto no fue todo, el dueño del restaurante también dijo en un princpio que no sabía quién era Luciani aunque segundos después aseguró que es un cliente habitual.

Como si esto fuera poco y para agrandar la imagen del controvertido fiscal, Francisco Rosat aseguró que "cuando la gente se dio cuenta de quien era luciani empezó a aplaudir. Cosa que hasta ahora ni siquiera Feinmann se había animado a decir.