Hoy se llevará a cabo la sesión extraordinaria en la Cámara de Diputados, donde se pondrán en consideración cuatro dictámenes para reformar el Impuesto a las Ganancias: el del oficialismo, el del FpV-PJ, el del massismo en conjunto con el bloque Justicialista y el de la izquierda.

Cuales son las diferencias principales entre estos proyectos:

El del oficialismo propone incrementar un 15 por ciento el mínimo no imponible de Ganancias, por lo que tributarían el impuesto los solteros que superen los 21.712 pesos netos y los casados con dos hijos con sueldos mayores a los 25.230 pesos.

También baja del 9 al 5 por ciento la alícuota que deberán pagar las personas comprendidas en la escala más baja. Aquellos que sean alcanzados por primera vez pagarán en 2017 una tasa del 2 por ciento sobre la ganancia neta imponible.

Se acotan las deducciones que pueden hacerse por hijos a cargo, ya que sólo podrán computarse descuentos hasta los 18 años y ya no hasta los 24 años como establece la legislación vigente, y se limitan los descuentos por cónyuge al mismo nivel.

También se incorporó al dictamen oficial la posibilidad de hacer deducciones por viáticos y por alquiler de viviendas de hasta un 40 por ciento del valor y con un tope de 4.000 pesos mensuales o 48.000 pesos anuales.

Además se aceptó el pedido de la oposición para gravar las apuestas de máquinas tragamonedas, pero se desechó cualquier tentativa de avanzar en la renta financiera.

El dictamen oficial tendría entre 100 y 105 votos.

El del Frente Renovador y el bloque justicialista lleva hasta 49 mil pesos el mínimo no imponible, y una modificación de las alícuotas, que en la escala más baja tendrá un porcentaje del 3 por ciento (frente al 9 por ciento que establece la legislación la tabla actual).

Propone un impuesto a los plazos fijos mayores a 1.500.000 pesos, a fideicomisos, a fondos comunes de inversión, a dividendos, a operaciones de dólar futuro, así como el restablecimiento de las retenciones a la minería y un impuesto al "Capital Improductivo".

El del Frente para la Victoria plantea que sólo tributen Ganancias el 10% de los asalariados que más gana, y que la responsabilidad de definir la línea de corte sea de la AFIP a partir del análisis de las estadísticas suministradas por el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA).

Amplía los gravámenes a la renta financiera, incorporando impuestos a los intereses por depósitos en cajas de ahorro, y también plantea el cobro de Ganancias a jueces y fiscales, así como la restitución del impuesto a los Bienes Personales.

Mientras que el de la Izquierda propone simplemente eliminar el impuesto al salario para los trabajadores pero tiene muy pocas chances de prosperar.