En otros tiempos la policía iba a las marchas a mantener el orden pero iban desarmados. Desde la llegada de Patricia Bullrich la cosa cambió radicalmente y los efectivos no tienen problema en reprimir porque claramente no tienen consecuencias.

De hecho los efectivos a cargo de la ministra Bullrich tienen la orden de reprimir y obviamente lo hacen con total impunidad. No tiene costo. Lo que hace a la ministra aún más responsable de las consecuencias.

Desafortunadamente, si esto no se corta ya, en cualquier momento va a haber un muerto en las calles por ejercer su derecho a la protesta y obviamente desde el Estado intentarán echarle la culpa al muerto.

Nicolás Munafó conoce desde hace tiempo lo que pasa en las marchas porque las cubre a diario y hasta ya entiende los códigos entre los jefes del operativo que con total impunidad atacan a la población.