El presidente Mauricio Macri está de recorrida por Chaco, provincia que visitó el miércoles, un distrito donde Cambiemos no tuvo buena acogida en las PASO. 

Macri se mostró con el gobernador Domingo Peppo, donde el jefe de Estado prometió una reactivación económica y la creación de 200 mil puestos de trabajo en la industria de la madera. También condenó “la violencia” en la Argentina, como parte del discurso que enarbolaron desde la desaparición forzada de Santiago Maldonado.

El mandatario seguirá de recorridas en los próximos días alternando entre las distintas provincias y el territorio bonaerense. Esta semana se concentrará más en el Conurbano y la provincia de Buenos Aires.

Con la ayudita de los datos del INDEC, de la ANSES y de encuestas realizadas por la consultora de Jaime Durán Barba, la campaña de Cambiemos seguirá con la misma dinámica respecto a la estrategia realizadas antes de las PASO, pero reforzando en las zonas que la Big Data le remarca donde hay que reforzar. 

Quizás como resultado de este cruce de encuestas y focus groups, ayer Macri desembarcó en Chaco con la promesa de más trabajo para los trabajadores de la madera. 

También en un acto que realizó en Roque Sáenz Peña anunció que se van a "empezar a construir casa de madera que son de excelente calidad", en plan de prometer de cara a las elecciones de medio término, y que la construcción "va a generar 200.000 puestos de empleo en Chaco y la Mesopotamia". 

El expresidente de Boca estuvo acompañado del ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile; y de Transporte, Guillermo Dietrich. 

En su recorrida, el presidente no omitió la condena a “la violencia” que viene reiterando desde que empezó a recibir el reclamo por la desaparición de Maldonado. “Cambiar también es entender que la violencia no es la forma, no nos podemos expresar desde ese lugar. Es entender que tenemos que respetar al que piensa distinto”, sostuvo el mandatario.