Fuerte rechazo al polémico plan del gobierno para ampliar la edad jubilatoria
El titular del PAMI, Carlos Regazzoni, alentó la idea del PRO de aumentar la edad jubilatoria. “La gente a los 65 años puede seguir trabajando”, dijo el funcionario macrista. "Es la teoría eterna del FMI", respondió el diputado del Frente para la Victoria, Díaz Roig. "Me parece una locura", alertó Mirta Tundis.
Hace unos días, el director del PAMI, Carlos Regazzoni, se manifestó a favor de aumentar la edad jubilatoria, ya que sostuvo que “la gente a los 65 años puede seguir trabajando”, e incluso deslizó que los argentinos deberían mantenerse en actividad hasta los 72.
El defensor de la tercera edad, Eugenio Semino, rechazó la posibilidad de que se discuta un aumento en la edad jubilatoria al asegurar que en la Argentina “no tiene sentido” esa instancia debido a la falta de creación de puestos de trabajo y al alto porcentaje de empleo en negro.
“En la Argentina hay dos datos: tenemos un mercado laboral con una gran expulsión y más de 40 por ciento de trabajadores en negro. Esta discusión carece de todo sentido”, expresó.
Semino salió a rechazar así las versiones que indican que algunos sectores del Gobierno evalúan un incremento en el piso de la edad jubilatoria como parte de una reforma integral del sistema previsional.
La novedad tomó cuerpo a partir de declaraciones que hizo el titular del PAMI, Carlos Regazzoni, al programa La Nación y que sirvieron como disparador del tema, si bien aclaró que él no es el encargado de “resolver” cuestiones de esa índole.
“Es la idea liberal de buscar el equilibrio monetarista de las jubilaciones por eliminación, por genocidio”, dijo a Página/12 el diputado Juan Carlos Díaz Roig, del Frente para la Victoria. “Me parece una locura. No es un tema que se pueda tratar en un momento del país en el que no hay trabajo y disminuyó la expectativa de vida”, agregó la diputada Mirta Tundis, del Frente Renovador, en diálogo con este diario.
“Creo que la gente tiene hoy en día muchos años de vida saludable por delante”, se justificó Regazzoni para augurar otros tantos de trabajo para quien lo conserve y varios especialistas salieron a cruzarlo. “Subir la edad jubilatoria es la teoría eterna del FMI y que le impusieron a Grecia y España para refinanciarle sus deudas. Es la lógica del sistema de capitalización, donde lo importante es que capital llegaron a acumular los trabajadores y no que edad tienen, y que ya fracaso también en Chile. Con ese mismo criterio monetarista, el Gobierno también crea la pensión universal, que está por debajo de la jubilación mínima y anula la pensión derivativa a sus conyugues”, dijo Díaz Roig, uno de los especialistas en temas previsionales del FpV.
Para la también especialista Mirta Tundis “no están dadas las condiciones” para el aumento de la edad jubilatoria. “En el resto del mundo la edad promedio para las jubilaciones están entre los 60 y 65 años. Si bien la expectativa de vida ha aumentado en muchos lugares, en la Argentina bajó con respecto a otros países de la región: aquí es de entre 75 y 76 años y en Chile de 80”, señaló la diputada massista.
Sus propuestas tampoco coinciden con el oficialismo. “Estoy de acuerdo con que una persona de 60 o 65 años puedan seguir trabajando en forma voluntaria en relación de dependencia con sus aportes y contribuciones al sistema. Pero debe continuar la jubilación mínima y universal en el sistema de reparto y quienes quieran o puedan hacer un aporte adicional voluntario a sindicatos, mutuales o seguro de retiro”, insistió Díaz Roig que quiere que el debate de una reforma al sistema previsional se realice en el Congreso.