Feinmann sacó al aire a Myriam Bregman para provocarla y agredirla con bajeza
A pesar de que parecía que quería entrevistarla para hablar sobre el paro, Feinmann se limitó a atacar duramente a la legisladora porteña de Izquierda Unida y pedirle que renuncie.
Un diálogo requiere de dos personas que quieran escucharse para intercambiar opiniones, pero Eduardo Feinmann tenía otras intenciones cuando su movilero encontró a Bregman en una de las locaciones donde se manifestaba en contra de la política económica del Gobierno.
Es envidiable la entereza y el control de su caracter por parte de Bregman ya que cualquier otro hubiese explotado ante las provocaciones de Feinmann.