El debate que se daría este miércoles en el Senado sobre la Ley Bases no tiene garantizado un claro ganador y evidentemente el Gobierno está preocupado por eso. Tan es así que hasta postularon a la senadora del Movimiento Popular Neuquino y aliada de Bullrich, Carmen Lucila Crexell, para la embajada ante la Unesco, por lo que se iría a vivir a París y con un sueldo de 20 mil dólares mensuales.

El punto está sobre si es ético que la senadora vote en una ley tan importante que pide el Gobierno, si al otro día será representante de ese mismo Gobierno ante la Unesco. Claramente el nombramiento de Crexell se les escapó antes de tiempo ya que no se tenía que saber antes de la votación de este miércoles.

Obviamente la Senadora Crexell intentó minimizar el hecho asegurando que viene trabajando por ese cargo desde hace mucho tiempo y que aunque lo habían considerado caído cuando Patricia Bullrich perdió las elecciones, ahora se habría reflotado el proyecto. La senadora ni siquiera está pensando en que pueda haber un conflicto de intereses y trató de justificar su nombramiento.

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