El candidato peronista Sergio Ziliotto se enfrenta al radical Daniel Kroneberger, que busca ocultar la marca Cambiemos como hizo el Gobierno en otras provincias.

Se espera sea una sólida victoria del Partido Justicialista, espacio que desde el retorno a la democracia ganó todas las elecciones (siempre con más de 10 puntos de ventaja salvo en el año 1983).

El PJ aguarda por un nuevo festejo. Esta vez en La Pampa, la provincia donde comenzó el año electoral. El gobernador Carlos Verna se bajó de la reelección tras ser diagnosticado de cáncer, y eligió para la sucesión al diputado nacional Sergio Ziliotto.

El panorama viene más complicado para el radical Daniel Kroneberger, también diputado nacional, que derrotó por amplio margen en la interna de Cambiemos al ex futbolista de Boca y ex secretario de Deportes de Macri, Carlos Mac Alllister. Aquella victoria en febrero infló el pecho de los correligionarios que se animaron a plantarse en otras provincias y sacudir la disputa nacional de la alianza gobernante.

En La Pampa ya no existe Cambiemos, ahora se presenta como Avancemos y con el amarillo desterrado de la campaña. Macri tiene una imagen negativa que ninguna encuesta ubica por debajo del 60 por ciento.

La incógnita está en cuántos puntos habrá de diferencia y si el peronismo logra recuperar la ciudad de Santa Rosa con un cristinista puro, Luciano Di Nápoli, que venció en la disputa interna a un peronista tradicional, y que dedicó el triunfo especialmente a Cristina Kirchner. Tendría que producirse un corte de boleta descomunal e histórico para que la UCR no pierda otra capital provincial en su aventura macrista.