Hay veces que al mal tiempo hay que tomarlo con buena cara, como hace Lucas Upstein que se permitió una aguda reflexión sobre los infiltrados de la policía en las marchas.

Tomando como referencia lo ocurrido en las afueras del Congreso donde se vivió una brutal represión policial a los jubilados que protestaban, hizo un chiste cargado de verdad.

Es cierto que a veces es difícil reírse pese al sufrimiento y el dolor de aquellos que salieron a la calle a enfrentar al gobierno libertario, pero Upstein mostró toda su capacidad para moverse en el límite sin pasarse de la raya.