Eduardo Feinmann pudo haber leído el documento que publicó Cristina Kirchner es sus redes sociales y tal vez hubiera aprendido algo nuevo o al menos pudo haberla criticado.

Pero el hombre prefirió quedarse en el plano del ridículo y en lugar de analizar el documento de Cristina le reclamó que no hubiera repudiado el supuesto atentado contra Nicolás Pino, el presidente de la Sociedad Rural.

El mismo Feinmann que trató de poner en duda el intento de asesinato contra Cristina, ahora le reclama a ella, el hecho de no haber repudiado el hecho de que llegara un paquete explosivo a la Sociedad Rural Argentina, hiriendo a la secretaria de Pino.