Son esos razonamientos que sirven tanto para justificar una cosa como su contrario. Porque así como Ramiro Marra sostuvo que los viajes de Javier Milei no dificultan el andar de su gobierno porque “existen los celulares”, dando a entender que se puede comunicar con sus funcionarios, también podrían servir para dialogar con sus interlocutores extranjeros.

Es que tranquilamente el Presidente podría tener esos diálogos por zoom o por llamadas telefónicas, sin la necesidad de emprender un viaje cada vez que quiere hablar con un empresario.

Si bien la repregunta de los panelistas del canal más oficialista de la grilla no llegó, las caras de estupefacción al escuchar la defensa de Marra dejó en claro que la respuesta era pobrísima.