La jueza en lo contencioso administrativo Elena Liberatori recibirá este lunes a las 12.30 en audiencia a funcionarios del gobierno de la Ciudad, quienes deben explicar las precarias condiciones de salubridad en que viven los habitantes del edificio conocido como "Elefante Blanco", en Villa Lugano.

La audiencia se produce en el marco de una acción de amparo promovida por la Defensoría General porteña y tras la inspección que la propia jueza hizo en abril al lugar, donde comprobó la falta de agua potable y la invasión de ratas en un gigantesco basural que hay en el subsuelo del edificio, entre otras carencias que sufren sus habitantes.

En simultáneo con la audiencia, está previsto que se realice una movilización de vecinos hacia la sede del juzgado.


"La jueza marcó en esa ocasión una serie de obras que el gobierno porteño debería haber hecho para mejorar las condiciones de vida de la gente, pero no hizo nada y sólo se limitó a ofrecerles subsidios que resultan insuficientes", dijo Ramiro de los Santos, defensor en primera instancia.


El lugar es un edifico de 16 pisos a medio construir que estaba destinado a ser el hospital más grande de Latinoamérica, pero el proyecto, que data de 1923, fue abandonado por los sucesivos gobiernos, por lo que sus tres primeros pisos fueron ocupados por familias sin vivienda, algunas de ellas desde hace unos 40 años.


De los Santos aseguró que "el amparo de la Defensoría fue presentado en diciembre del año pasado y fue ratificado por la Cámara tras la apelación presentada por la Ciudad. En la audiencia el gobierno porteño deberá explicar por primera vez en forma pública por qué no efectuó las obras que se comprometió a realizar".


El edificio, ubicado en el cruce de las avenidas Eva Perón y Piedrabuena en el barrio de Villa Lugano, está ocupado por 312 personas, de las cuales el 47,1 por ciento son niños y adolescentes que viven en 75 precarias casillas construidas en los recovecos del inmueble, de acuerdo a un relevamiento de la Defensoría.


La condiciones de vulnerabilidad de los vecinos están reflejadas en la tasa de empleo que ronda el 23 por ciento, muy baja en comparación con el promedio de la Ciudad de Buenos Aires (51 por ciento de empleo formal), mientras que hay 18 de las 75 unidades con tasa de empleo cero.


Por otro lado, el 41,4 por ciento no percibe ningún tipo de cobertura social, sólo el 62,5 por ciento de los chicos de 3 a 5 años asiste al nivel inicial, y del 58,6 por ciento de personas que reciben programas sociales sólo el 28 por ciento recibe la Asignación Universal por Hijo.