Alguno podrá pensar que es un meme, pero no. La captura de pantalla de Nicolás Dujovne con el cartel de "no volvamos al al Fondo", lo sostuvo cuando todavía era panelista del programa de Carlos Pagni, en TN. Si bien en ese video se refería a los Fondos Buitres, y alguno podrá decir que es más un chascarrillo que una información, lo cierto es que el Ministro de Hacienda realmente dijo que el Gopierno no iba a hacer un programa con el FMI. 

"No vamos a tener un programa con el Fondo Monetario", tituló Ámbito Financiero la nota que le hizo a Dujovne el 10 de marzo de 2017.

Consultado por el medio, sobre si habrá gestiones con el FMI en la cumbre de ese año, Dujovne dijo:

"Con el FMI estamos contentos de volver a tener una relación madura. Antes éramos socios de un club que decía prohibido entrar a la cancha sin remera y entrábamos sin remera. Era la posición del Gobierno anterior. Si les resultaba tan molesto formar parte de ese club, ¿por qué no se retiraban? Ahora Argentina simplemente acepta las normas y tiene una revisión bajo el artículo IV. Nuestra política económica es autónoma. El FMI puede decir lo que se le ocurre y nosotros hacemos lo que tenemos ganas. El FMI sólo puede pedirles medidas a los países cuando tienen un programa en el que presta y ahí empieza a marcar la cancha. Nosotros no tenemos programa con el FMI ni vamos a tener. Ahora el Fondo es un buen ámbito de discusión. No es el que vimos en el pasado."

Este martes y tras una corrida cambiaria que se extendió por una semana y que catapultó el precio del dólar sin que ninguna política de las que se aplicaron pueda controlarlo, el presidente Mauricio Macri anunció el inicio del diálogo con el FMI para solicitar "financiamiento". Eso implica hacer un programa. Todo lo contrario a lo que había avisado el ministro.

Si bien no se dieron detalles aún, se sabe que el Fondo, a cambio del dinero necesario sortear la crisis, pedirá un plan de ajuste. El mismo seguramente incluya, un mayor achicamiento del gasto público, con más despidos de trabajadores, reducción de las jubilaciones y menor inversión en materia social. Lamentablemente, este cronista no necesita esperar a que los acontecimientos se produzcan para relatarlos, porque esta película ya la vimos. Y sabemos que no termina bien.