Mientras Mauricio Macri niega la realidad del golpe de Estado en Bolivia y sus funcionarios de primer orden como Jorge Faurie le siguen la corriente, el Congreso debatirá el miércoles un repudio al derrocamiento de Evo Morales.

Por un lado, el Senado se reunirá el miércoles a la mañana para repudiar el golpe de Estado en Bolivia. El pedido de sesión especial fue formalizado por el bloque del Frente de Todos con el apoyo del radicalismo.

"Como argentinos y latinoamericanos, tenemos que pronunciarnos en contra del golpe de estado de las FFAA y policía boliviana. Espero que el gobierno de @mauriciomacri dé señales claras como jefe de un Estado con memoria Abogo por las primacía de las urnas y no de las armas", tuiteó el jefe de bloque Argentina Federal, Carlos Caserio. 

"La historia nos ha demostrado que las intervenciones militares jamás deben ser la respuesta a un conflicto político. El único camino democrático tal como marco la OEA son las elecciones libres y transparentes, en el marco de las instituciones y el Estado de Derecho", hizo lo propio el jefe del bloque de la UCR, Luis Naidenoff.

Por otro lado y a pedido del titular de la bancada del FPV, Agustín Rossi, la Cámara de Diputados haría lo propio el mismo miércoles por la tarde, después de la reunión de la Asamblea Legislativa prevista para proclamar la fórmula Fernández-Fernández.

En la cámara baja hay en danza cinco proyectos de resolución o declaración, elaborados por distintos bloques, que apuntan en idéntico sentido: el repudio al golpe de Estado que derrocó a Evo Morales.

Según trascendió, el interbloque Cambiemos daría quórum para la sesión especial de la tarde, pero llevaría su propio texto para ser tratado en el recinto de Diputados.