De especulaciones están hechos muchos medios del gran mundo y si bien en Argentina se encuentran concentrados bajo el nombre de Clarín, en otros países como en Brasil, cambian los títulos pero los intereses son siempre los mismos. Marina Silva, la candidata que los medios postulaban como rival de Dilma Rousseff las últimas elecciones de Brasil, salió tercera para luego no entrar entrar en el ballotage.

Pero los medios concentrados brasileros no fueron los únicos en apoyar a Silva e ir en contra de Dilma Rousseff, quien se impuso por ocho puntos. El asesor de Mauricio Macri, líder del PRO, Durán Barba, escribió en el diario Perfil una columna en la que postuló a la candidata del establishment como la posible ganadora.

Silva, en contra del matrimonio igualitario, de la intervención estatal y las políticas sociales, se postuló como la gran elegida de medios como O Globo, monstruos de información que gastaron y ocuparon sus tapas con especulaciones y títulos malintencionados, perdió. Y dejó expuestos a varios personajes de la política que no buscan defender intereses nacionales sino todo lo contrario.