La barrida de los manteros de Once que realizó la Policía de la Ciudad dejó a muchos inmigrantes africanos sin posibilidad de trabajar, lo que molestó incluso a los comerciantes de la zona que aprovechaban la gran afluencia de compradores para que sus vidrieras también sean observadas.

Este senegalés se quejó ante las cámaras de C5N del trato discriminador que sufrieron y puso el foco en el trabajo de los que buscan un mejor futuro en otro país, poniendo como ejemplo a los sudamericanos que viajan a Europa.