En un acto con los trabajadores del Hospital Borda, a dos años de la represión de la Policía Metropolitana en ese lugar, Bodart opinó que “estos son los personajes que lleva Rodríguez Larreta, que junto con Gabriela Michetti y su jefe Mauricio ‘Micky Vainilla’ Macri representan el menemismo del siglo XXI”.
Se trata de Vicente Engelman, que en los últimos años de la dictadura era capitán de fragata e integró el Servicio de Inteligencia Naval. En febrero de 2001, en su condición de vocero del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, declaró que no pensaba “entregar” la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA).
“Vamos a unificar en ese lugar un gran espacio académico para las Fuerzas Armadas”, dijo en ese momento Engelman, y volvió a indignar a los representantes de los organismos de derechos humanos porque ratificaba la resistencia de la Armada a dejar la ESMA.
Convencido de que el enorme predio de Núñez quedaría en manos de los marinos, Engelman agregó que “la concentración de unidades académicas se inscribe dentro de un proceso de reestructuración que permitirá unificar materias y profesores, lo cual liberará edificios de alto valor inmobiliario, con la idea de que lo que pueda recaudarse por las ventas vuelva a las Fuerzas Armadas”, según publicó este diario el 2 de febrero de 2001.
Según informa Página12,  en 2010 el Ministerio de Defensa, a cargo de Nilda Garré, envió la nota 8647/10 al Archivo Nacional de la Memoria, con el listado completo del personal que revistó en el Servicio de Inteligencia Naval entre 1975 y 1983, y allí también aparece Vicente Engelman, junto a un centenar de oficiales, suboficiales y personal civil de inteligencia (PCI).
Por citar sólo un dato de las actividades del SIN, este organismo tuvo durante la dictadura una casa en Villa Adelina, cerca de la Panamericana, conocida como “la casa del COAR” o “la casa del SIN”, que fue su centro de torturas como paso previo a la internación de prisioneros en la ESMA.
Consultados por ese diario, voceros de Rodríguez Larreta evitaron dar más información sobre el postulante. Los vecinos de Caballito tendrán ahora la opción de convertirlo en candidato a comunero, por la Comuna 6, donde ocupa el segundo lugar como suplente.

En un acto con los trabajadores del Hospital Borda, a dos años de la represión de la Policía Metropolitana en ese lugar, Bodart opinó que "estos son los personajes que lleva Rodríguez Larreta, que junto con Gabriela Michetti y su jefe Mauricio 'Micky Vainilla' Macri representan el menemismo del siglo XXI".

Se trata de Vicente Engelman, que en los últimos años de la dictadura era capitán de fragata e integró el Servicio de Inteligencia Naval. En febrero de 2001, en su condición de vocero del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, declaró que no pensaba "entregar" la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA).

"Vamos a unificar en ese lugar un gran espacio académico para las Fuerzas Armadas", dijo en ese momento Engelman, y volvió a indignar a los representantes de los organismos de derechos humanos porque ratificaba la resistencia de la Armada a dejar la ESMA.

Convencido de que el enorme predio de Núñez quedaría en manos de los marinos, Engelman agregó que "la concentración de unidades académicas se inscribe dentro de un proceso de reestructuración que permitirá unificar materias y profesores, lo cual liberará edificios de alto valor inmobiliario, con la idea de que lo que pueda recaudarse por las ventas vuelva a las Fuerzas Armadas", según publicó este diario el 2 de febrero de 2001.

Según informa Página12,  en 2010 el Ministerio de Defensa, a cargo de Nilda Garré, envió la nota 8647/10 al Archivo Nacional de la Memoria, con el listado completo del personal que revistó en el Servicio de Inteligencia Naval entre 1975 y 1983, y allí también aparece Vicente Engelman, junto a un centenar de oficiales, suboficiales y personal civil de inteligencia (PCI).

Por citar sólo un dato de las actividades del SIN, este organismo tuvo durante la dictadura una casa en Villa Adelina, cerca de la Panamericana, conocida como "la casa del COAR" o "la casa del SIN", que fue su centro de torturas como paso previo a la internación de prisioneros en la ESMA.

Consultados por ese diario, voceros de Rodríguez Larreta evitaron dar más información sobre el postulante. Los vecinos de Caballito tendrán ahora la opción de convertirlo en candidato a comunero, por la Comuna 6, donde ocupa el segundo lugar como suplente.