Tras la reunión que mantuvo con Lula antes de concurrir a la conferencia "La lucha política en América Latina hoy" organizada por la Fundación Perseu Abramo, en San Pablo, Cristina sostuvo que "estar junto a Lula es un poco estar junto a la historia de los mejores años que vivió nuestra región de América del Sur".

La expresidenta argentina precisó que, antes de esos "mejores años", el subcontinente "durante décadas había perdido oportunidades, que durante décadas había excluido a millones de compatriotas que no tenían acceso a los bienes y servicios; como la educación, la salud pública, la universidad, la vivienda, el trabajo digno, el trabajo registrado y mejores condiciones de vida”.

Luego de calificarlo como "luchador" y "el primer obrero presidente", Cristina planteó que la reunión con Lula tuvo por finalidad "intercambiar y compartir cómo vemos la situación de la región". En ese sentido, habló de "una suerte de retroceso" en las políticas sociales.

“Estoy absolutamente convencida que la realidad finalmente se impone y podrá verse claramente que esos derechos que adquirieron (los pueblos), más allá de los esfuerzos y merecimientos que cada uno hizo para tenerlos, se debieron a gobiernos que le dieron la oportunidad de poder trabajar y estudiar", dijo la expresidenta.

"Es cierto que ellos fueron los que trabajaron y estudiaron, e hicieron mucho para tener su casa o su auto y para poder lograrlo. ¿Pero por qué no lo habían podido hacer antes? Por una razón muy sencilla: porque éramos gobiernos que le dábamos posibilidades a todos. Eso es lo que hablamos con Lula y vamos a seguir conversando”, concluyó Cristina.

Por su parte, Lula afirmó que "es una alegría inmensa volver a ver a Cristina", porque "recibir a Cristina en mi oficina es un buen momento de la historia política de América del Sur y de las relaciones Brasil y Argentina".

“Lamentablemente tanto Argentina como Brasil ahora tienen gobernantes que no piensan en América Latina ni en América del Sur. En realidad, son personas que tienen una visión muy subordinada a la política norteamericana, que creen que alguien va ayudarlos a crecer", dijo el líder del PT con relación a Temer y Macri.

No obstante, dijo tener la "convicción de que el pueblo argentino y el pueblo brasileño empiezan a darse cuenta, saben de qué van a perder muchas conquistas que obtuvieron en nuestros gobiernos".