Una práctica habitual en los medios de comunicación es dar definiciones contundentes sobre temas que se tocan de oído, con poca preparación.

Un ejemplo de esto lo acaba de dar el doctor Claudio Zin que, sin haber hecho una evaluación rigurosa del impacto de la creación de universidades públicas en el conurbano bonaerense salió a atacarlas sin contemplación.

Lejos de compartir datos que avalen sus dichos y basándose en el prejuicio de que esas casas de altos estudios solo se hicieron para favorecer cargos circunstanciales, Zin volvió a mostrar su catadura moral.