Mientras algunos aseguran que Carlos Kikuchi renunció al partido a tan sólo tres días del cierre definitivo de listas, dejando al partido a la deriva, otros creen que fue el mismo Javier Milei el que lo despidió después de una charla con su hermana y principal asesora, Karina.

Lo cierto es que en todas las elecciones provinciales en las que presentaron candidatos los resultados de los libertarios fueron pésimos y esa imagen de ganador vendida por los medios se cayó por su propio peso.

Las redes obviamente se hicieron un festín con la salida de este personaje de extraño apellido.