Autopistas: Bercovich explica el decreto de Alberto para frenar el negociado macrista
La extensión de la concesión de ambas autopistas que hizo el exministro Guillermo Dietrich le dio u$s750 millones a las concesionarias de las autopistas del Sol y Grupo Oeste, que tenía que poner el Estado a la familia de Mauricio Macri a través de la firma Sideco.
A través de un decreto, el Gobierno rechazó la recusación realizada por las concesionarias Autopistas del Sol y Grupo Concesionario del Oeste por la renovación de los contratos de concesión otorgada por la administración macrista en 2018 con un regalo de 750 millones de dólares para las empresas.
Alberto Fernández firmó el Decreto 562/2022 publicado en el Boletín Oficial. La empresas habían la recusación a Katopodis, Zannini y Arrieta para que se abstengan de actuar en un expediente por un supuesto prejuzgamiento.
La auditoria empezó en 2020 contra ambas firmas para que se declare la nulidad de las renegociaciones de sus contratos de concesión aprobados en julio de 2018 y que favorecían de manera escandalosa a las empresas, una de ellas de la familia Macri.
Todo se había hecho por un decreto en 2018 que llevan las firmas de la ex vicepresidenta, Gabriela Michetti; del entonces jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ex ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, se renovaron ambos contratos de concesión hasta el año 2030. O sea incluso por varios años más de lo que gobernarían.
En concreto la extensión de la concesión de ambas autopistas, según recuerda una nota de Ámbito, generó polémica por el reconocimiento a las firmas de u$s750 millones, por una supuesta deuda del Estado y la participación comercial de la familia del expresidente, Mauricio Macri a través de la firma Sideco, como accionistas de Ausol hasta mayo de 2017.
En el decreto actual que firmó Alberto, el Gobierno planteó que "los funcionarios recusados no poseen un rol decisor en el trámite de las actuaciones referidas" y que, asimismo, "el citado proyecto de decreto se enmarca en los denominados actos de administración y, por lo tanto, los mencionados planteos recusatorios no resultan procedentes".
El rechazo de los planteos presentados por las empresas es un paso previo para avanzar con el proceso judicial "sin dilaciones", señala el decreto en sus considerandos.
Para el Gobierno, ambas empresas, concesionarias del Acceso Norte y el Acceso Oeste, "no han brindado razones ni motivos suficientes que permitan justificar el planteo de recusación".