Aguad: "La Ley de Medios no va a subsistir en nuestro gobierno"
El antidemocrático ministro de Telecomunicaciones de la Nación, Oscar Aguad, insistió en que la "Ley fue para aniquilar a medios como Clarín y Cadena 3. La libertad ahora va a ser absoluta" y amenazó con eliminarla.
El Radical Oscar Aguad, apodado "El milico", por su amistad manifiesta con el genocida Luciano Benjamín Menéndez, entre otras cosas, adelantó que la Ley de Medios no va a subsistir en el gobierno de Mauricio Macri.
"La regulación de la Ley de Medios no va a subsistir en nuestro gobierno. Los medios van a competir libremente en el mercado", afirmó el funcionario que claramente entiende la la comunicación como una mercancía y no como un derecho humano.
Si bien también prometió que "trataremos de ayudar a los más pequeños" dentro de los medios de comunicación, es la Ley 26.522 de servicios de Comunicación Audiovisual que él quiere eliminar, que fue trabajada democráticamente a lo largo y ancho del país durante más de un año, la que garantiza el derecho a la comunicación a "los más pequeños".
El funcionario insistió con que la norma que generó cientos de radios y canales de televisión comunitaria, fue creada con la finalidad de "aniquilar" a medios de comunicación como el Grupo Clarín y Cadena 3, que desde el 2009 violan la Ley, declarada constitucional por la Corte Suprema de Justicia, entre otras razones por tener más de 200 licencias que la permitidas.
Aguad, por otro lado, se quejó de la permanencia de Martín Sabbatella en el directorio de la AFSCA. "Una ley del Congreso no puede limitar la capacidad del presidente. Es tan absurdo. Estamos viendo si la semana que viene solucionamos este problema", anticipó.
Ese "absurdo" que marca el 'Milico' Aguad, es en realidad un reaseguro republicano que establece un desfase entre las autoridades de algunas instituciones con la del Poder Ejecutivo para garantizar políticas de Estado que van más allá de las políticas partidarias. Para lo cual se procuró que el mandato del actual directorio termine en 2017, dos años después de las elecciones presidenciales.