¿Provocadores o furia en Esquel? Incidentes en el juzgado que lleva la causa Maldonado
Un grupo de personas, -algunos encapuchados-, intentó ingresar por la fuerza al edificio donde se encuentra el juez de la causa, Gustavo Lleral. La policía intervino, hubo intercambio de golpes y vidrios rotos. Diario Registrado habló con algunos testigos.
Un grupo de jóvenes, varios de ellos encapuchados, protagonizó este miércoles incidentes en la puerta del juzgado federal de Esquel, donde se instruye la causa por la desaparición de Santiago Maldonado.
La protesta que se realizó esta mañana en la esquina de las calles 25 de mayo y San Martín en la ciudad cordillerana de Esquel, mutó en violencia cuando los manifestantes comenzaron a increpar e insultar a policías federales y a los agentes provinciales.
Según consigna el sitio Andino Digital, "en especial a una de las mujeres que llevaba chaleco fluorescente". Que coincide con el relato del enviado de Crónica TV.
Los manifestantes comenzaron a empujar a los policías federales, golpearon sus escudos plásticos mientras los insultaban con vehemencia y los acusaban por la desaparición de Maldonado.
"Ustedes son ratas de laboratorios, así como lo mataron a Santiago nos van a matar a todos", vociferaba una mujer mientras intentaba cubrir su rostro con una bufanda.
La guardia de la Policía Federal se había apostado desde temprano en torno al edificio del Juzgado Federal, donde tiene sus oficinas el juez Gustavo Lleral quien el martes realizó un operativo que encontró un cadáver de un hombre en una zona del río Chubut donde era buscado Santiago Maldonado.
¿Furia o provocadores?
"Hay de las dos cosas", contestan cada vez que Diario Registrado pregunta a referentes del Colectivo por la Aparición con Vida de Santiago Maldonado.
"Que haya incidentes y presentar a los mapuches y a quiénes los apoyamos como violentos es agua para los violentos", considera una integrante de la Asamblea de la Comarca de El Bolsón.
"Pero también es verdad que hay gente con mucha bronca, compañeros y amigos de Santiago que entienden que todo esto está armado desde el primer día y tienen mucha rabia", aporta un militante por el No a la Mina, Sí a la Vida, de Esquel.
Y concluyó: "También es cierto que hay muchos peñi (hermano, en mapuche) que se tapan la cara en las manifestaciones porque después son perseguidos y molestados por su militancia".
