La pelea contra el ajuste brutal del gobierno libertario empieza a ser individual y en la calle, ante la falta de respaldo de las organizaciones sindicales y el silencio estratégico de la oposición.

Un hombre pasó los molinetes de la línea A del subte sin abonar el pasaje, fue detectado y cuestionado por los guardias de seguridad que quisieron hacerlo bajar del tren.

Pero no solo se negó sino que, a los gritos, les dijo que no tenía plata para pagar y aseguró que iba a seguir viajando.