Cambiemos, fantasías y caprichos
“Y para concluir con todo, yo imagino que todo lo que digo es así, sin que sobre ni falte nada, y píntola en mi imaginación como la deseo”, Don Quijote de la Mancha.- “Digo que en todo tiene vuestra merced razón-respondió Sancho-y que yo soy un asno”.- ¿Alguien cree que estos veinte meses de adulteraciones y ficciones nos ha vuelto asnos? - ¿Cuando fue que nos volvimos tan torpes? – ¡Ah! En 2001.
¿Estaremos leyendo la realidad política y social, o una revista de negocios para vender publicidad? - No lo sabemos. Pero si el resultado de las PASO, el 22 de octubre sigue siendo que 2 de cada 3 argentinos rechaza el ajuste, Macri no podrá cumplir ni siquiera con las promesas a los organismos de crédito internacionales, las calificadoras de riesgo, la banca internacional, los tenedores de Lebacs ni al empresariado argentino. Hoy la incertidumbre en el exterior no se ha disipado, independientemente del medico del Banco Mundial que vino a respaldar a Macri hablando de su sacrificio y el sacrificio del pueblo coreano. La historia de Macri no se parece al sacrificado medico coreano, ni el pueblo argentino tampoco. Los inversores estadounidenses siguen esperando, por ahora nos van a vender cerdos. En voz baja pocos son los analistas “no pagos” que creen en una gobernabilidad sustentable “a palos”.
Los planes de estabilización del pensamiento hegemónico requieren equilibrio fiscal, no pueden bicicletearlos más (por el lado de bajar el gasto público). Para ellos no son sustentables, por definición. Por eso no funciono la devaluación competitiva de Prat Gay, según el mismo marco teórico. “Contrario sensu” en Argentina, los planes de estabilización no son sustentables a largo plazo desde la historia y una perspectiva social.
Después de las elecciones Macri es percibido como un Presidente embrollón hasta por Fantino. Cambiemos manipula elecciones y engaña a la sociedad, desnaturaliza atrevidamente la realidad, independientemente que el “mejor equipo” no resiste sus propios archivos. Todo esto probablemente no le permita a Cambiemos afianzarse en el largo plazo.
En el resultado nacional el peronismo gana lejos, la segunda fuerza nacional es la línea interna kirchnerista, que suma en todos los distritos 22%, Massa tiene 8%; Randazzo casi 6%, y 21% mas tienen los peronismos provinciales. Llámale como quieras, “es el peronismo”.
Revisemos la historia y, Alfonsín en 1985 con 43% no pudo terminar su mandato. De la Rua en 2001 hizo una pésima elección de medio término y a los dos meses renunció. Solo los presidentes peronistas: Menem en 1991 y Kirchner en 2005, que sacaron 41% pudieron consolidarse en el tiempo, para construir poder y lograr periodos largos.
Es patético que todavía se este por anunciar la derrota de Cambiemos en la provincia de Buenos Aires que aglutina el 38% del electorado. El primer candidato a senador nacional por Cambiemos en el distrito-Bullrich y la gobernadora Vidal ¿Habrán festejado la derrota? Si lo hicieron, fue desairando aun a su propio electorado al subestimarlo. Mucha gente que se fue a dormir temprano se despertó y ya al mediodía estaba enojada.
Dice Cambiemos que Cristina podría ganar. Aunque sea por un margen estrecho, si esto es así, este resultado tiene un significativo efecto político. En cambio si Cristina hubiera perdido aunque sea por unas décimas, probablemente el efecto “desaliento” en sus seguidores, habría hecho difícil revertir el estado de ánimo para octubre. Ahora si llega a ganar como admite Cambiemos, el festejo de la muchedumbre de la presidenta será el inicio de la campaña de octubre. Cambiemos puede ir por Massa y Randazzo, pero estos no son dueños de los votos peronistas, ni los peronistas o la izquierda tienen tradición de votar UCR o CEOS para realizar “ajustes”.
El gobierno desorienta. Lo primero que hizo fue iniciar negociaciones para poner límite al gasto público en 2018, mediante una reforma y actualización de la ley de Responsabilidad Fiscal (que fracaso durante el menemismo). Pero a la vez, y en forma inconsistente desarrolló la negociación de la distribución de los fondos coparticipados y la reclamación de la provincia de Buenos Aires, de aumentar el porcentaje asignado al Fondo de Redistribución del Conurbano. Los gobernadores han presentado acciones judiciales, se niegan a un entendimiento. ¿Cómo sigue este asunto fundamental?- Los gobernadores peronistas comienzan a pensar en armar bloques, para concentrar la negociación parlamentaria, que para todos será crucial. La intención del gobierno es limitar el gasto antes del 22 de octubre, postergando la reforma laboral, tributaria y previsional, para después del 10 de diciembre, a ver si suman algo.
Pero la realidad es que, el obstáculo mas importante no son las PASO, ni octubre, ni la política (recuerde el “que se vayan todos”), sino el conflicto social, los sindicatos y los movimientos sociales. Una marcha convocada por la CGT incluyendo al sindicalismo combativo y los movimientos sociales, más el conurbano bonaerense que voto en forma contundente. La izquierda no es un porcentaje, sino una parte de “la calle”, allí donde Duran Barba no llega. La decisión de la central obrera peronista fue unánime, hubo gremios de la izquierda moderada y una enorme aparición de movimientos sociales. Durante todo el fin de semana la Jefatura de Gabinete intento negociar con los dirigentes sindicales peronistas la suspensión de la marcha, pero no lo logró.
El campo social retoma la iniciativa, coincidiendo con el reclamo de unidad política y electoral que plantean Rossi y Katopodis. Me parece que “se acabo el amor por Dulcinea”.