El pibe que vivió el pogo más grande del mundo desde arriba -parafraseando a Eduardo Galeano-, al bajar a tierra otra vez , contó que somos como un mar de fueguitos...

Era su primera misa desde que se accidentó, en marzo de 2015. "Es mi sexto recital del Indio, el primero que iba en silla de ruedas", reveló Marcelo López en diálogo con Solos y de Noche, programa de radio Universidad. 

Este mendocino de 23 años que vive en Guaymallén, emocionó con su historia y la de sus amigos. "No estaba preparado, en la primera parte de Ji ji ji yo lo viví de pie apoyado en los hombros de dos de mis amigos", narró Marcelo, y reveló el momento exacto en que lo levantaron. 

Qué sintió, la repercusión que tuvo la foto, cómo se enteró de que "era famoso" una vez que él y la comitiva volvió a Mendoza desde Tandil. "El que abandona no tiene premio", dice la bandera que siempre lleva López y sus amigos a los recitales. "Es mi lema ahora", cierra. 

Gran nota, mejor historia.