Los hipopótamos de Pablo Escobar crecen rápido y podrían representar una amenaza
Si bien ya pasaron más de dos décadas de la muerte del narcotraficante, los hipopótamos que compró aun viven en su hacienda y son cada vez más, representando la manada salvaje más grande fuera de África. Los vecinos manifestaron su preocupación.
El narcotraficante colombiano Pablo Escobar, asesinado por la policía durante un tiroteo hace más de 20 años, compró una manada de hipopótamos que vivía en su hacienda en Antioquia, y que hoy en día representa una amenaza por la rapidez en la que se reproducen.
En su momento, la policía se encargó de matar y encarcelar a la mayoría de los miembros del Cartel de Medellín, pero no hicieron nada con los hipopótamos que el narcotraficante mantenía en su zoológico privado, en su Hacienda Nápoles, lo que dio espacio a que los animales se reprodujeran hasta tal punto de convertirse en la manada más grande fuera de África.
"Estaba yendo a una práctica de fútbol esta mañana y había uno en un parado frente a la escuela", dijo Lina María Álvarez, de 12 años, vecina del pueblo Doradal.
Para Diego Alejandro Rojas, de 19, esos animales son "como las mascotas del pueblo. Le tengo más miedo a las víboras que a los hipopótamos".
Por su parte, el veterinario local Jairo Leon Henao aseguró que esta región en el norte de Colombia es un "paraíso" para la especie, ya que a diferencia de su hábitat natural no tiene depredadores y se reproducen más rápido.
Escobar compró cuatro hipopótamos a un zoológico en California en la década de 1980 y los hizo traer en avión hasta su hacienda. Se estima que ahora hay 35 en la zona, según David Echeverri López, biólogo de la Corporación Autónoma Regional Cornare.
"Si se ponen agresivos son un riesgo para la biodiversidad colombiana. Podrían desplazar a la fauna autóctona", explicó Echeverri. "Son invasivos y muy resistentes a todos. Traen enfermedades que pueden matar al ganado", agregó.
Ahora, las autoridades se ven presionadas por encontrar una forma de contener a la manada antes de que la población desborde, teniendo en cuenta que estos animales viven en promedio 60 años y se reproducen rápidamente.
Para prevenir algún tipo de problema se construyeron barreras con árboles, rocas, alambrados y se les provee de comida para que no se alejen de la Hacienda. "Por ahora, afortunadamente, no tuvimos problemas", dijo León Henao. "No atacaron a nadie", agregó.
En África, su hábitat natural, los hipopótamos son uno de los animales más peligrosos para el hombre, especialmente cuando atacan canoas y barcos en los ríos.
"Es como estar en África, es un privilegio. Pero cuando te les acercas, da un poco de miedo", dijo Clara Nuñez, una vecina de Doradal.