La increíble evolución de un joven al que le cosieron la mano al abdomen tras un accidente
Un desperfecto de una máquina industrial hizo que los cuatros dedos de la mano de un joven quedaran irreconocibles. De todas maneras, los médicos llevaron a cabo una creativa intervención y ahora están cada vez más cerca de darle la movilidad que perdió. LAS IMÁGENES PUEDEN HERIR LA SENSIBILIDAD DEL USUARIO.
El británico Anthony Seward sufrió la amputación parcial de sus dedos a causa de una máquina que no fue reparada a tiempo por los dueños de la fábrica en la que trabajaba. Su mano quedó apretada por dos tubos a una presión industrial y quedó completamente irreconocible. De todas maneras, un año después del desastroso accidente, la terapia aplicada por los médicos muestra notorios avances, luego de pasar tres semanas con lo que quedaba de sus dedos "insertados" en un "bolsillo" de su propio estómago.
Los especialistas del Southmead Hospital cosieron la mano del joven, de entonces 20 años, a su vientre, con la intención de darle un revestimiento de piel y continuar el flujo sanguíneo.
El procedimiento al que fue sometido Anthony era utilizado por cirujanos a inicios del siglo XX y se aplicó con frecuencia en la Segunda Guerra Mundial. "Ahora es raro ver heridas que necesiten este tratamiento", señaló James Henderson, médico que participó en la cirugía, en declaraciones a la BBC.
Tuvieron que pasar tres semanas para que los médicos separen la mano del estómago y así continuar aplicando injertos de piel. Luego de varias operaciones más, los médicos lograron separar en tres especies de falange y otorgarle mayor movilidad al paciente.
Según explicó Hederson, existe la posibilidad de hacer trasplantes de los dedos del pie para conseguir mayor capacidad de agarre.
"Quiero agradecer a los médicos, paramédicos y enfermeros que me trataron. Hicieron un trabajo fenomenal", señaló el joven, que ha perdido su trabajo en la fábrica. "Han sido 12 largos, dolorosos y difíciles meses", agregó.
Anthony se encuentra en un litigio judicial con la empresa para lograr una compensación. Según admitió la propia firma, las condiciones del equipo no eran las adecuadas y el accidente pudo evitarse.