Stephanie Mariam, de 21 años, proveniente de Bournemouth, Gran Bretaña, gastó más de 3.000 dólares en los regalos navideños de sus perritos pomeranias Harvey Moon, de dos años  y Connie de tres.

Los obsequios consistieron en collares de cristal y camas de lujo para sus mimados. Stephanie relevó que gastó más en los regalos de sus perritos que en los de su propia familia.

Lo gastos incluyeron 1.792 dólares en dos camas de lujo para sus mascotas, 320 dólares en dos collares de cristal Swarovski, 720 dólares en vestimenta, 400 dólares en juguetes de Papá Noel y unos 300 dólares más en accesorios, incluyendo cepillos del pelo, broches y huesos extra grandes.

“Yo no gasto mucho en mí, no salgo de fiesta ni a beber con mis amigos porque mis perros tienen prioridad”, destacó la mujer, que trabaja como asistente en enfermería.

Como si eso fuera poco, a principios de año, Stephanie gastó 16.000 dólares en una fiesta para sus canes, la misma contó con un organizador, alfombra roja, bailarines y fuegos artificiales.


“Harvey Moon y Connie aman la Navidad. Les damos lo que cada perro quiere, amor, comida y mimos, con un poco de estilo”, concluyó.