Emily Pankhurst, de 20 años, pasó tres días en cuidados intensivos en un hospital de Canterbury, Inglaterra, luego de olvidarse un tampón absorbente durante nueve días, hecho que casi provoca su muerte.


“Cuando me di cuenta que tenía el tampón me lo saqué de inmediato. Estaba totalmente negro e infestado de bacterias. Me sentía muy mal. Media hora más tarde mi piel comenzó a mancharse y luego me sentí mareada, por lo que me tuvieron que llevar al hospital de emergencia en la ambulancia”, explicó la joven.


Emily fue tratada con 12 tipos diferentes de antibióticos. “Nunca sentí tanto dolor como ese. Me tuvieron que dar morfina”, recordó.


Afortunadamente, la estudiante recuperó del síndrome tóxico y volvió a la actividad normal.