El expresidente de Ecuador, Rafael Correa, fue despedido por una multitud antes de iniciar su retiro en Bélgica donde piensa dedicarse a la academia, profundizar en la escritura de varios libros y participar activamente en la Fundación de Pensamiento Político ‘Eloy Alfaro’, que él presidirá.

Correa ya señaló varias veces que tal vez se retire definitivamente de la política, a pesar de que muchos ecuatorianos pedían modificar la constitución para que pudiera ser votado como presidente otra vez. 

"Yo estoy seguro (..) que el 2 de abril derrotamos a la oposición, no estoy muy seguro (de) si venció la Revolución Ciudadana (..) Que no me digan que es cambio de estilo las claudicaciones y el entreguismo", exlamó Correa en un acto en las proximidades del aeropuerto de Tababela, dejando en claro las tensiones existentes con Lenín Moreno. 

Sin mencionar explícitamente a Moreno, Correa remarcó ciertos  "cambios de estilo" del que fuera su delfín ahora que está en el poder. 

"Entiendan compañeros, en lo humano, no son vacaciones, no es que me tomo un descanso (..) uno tiene deberes familiares, entiendan eso",  le explicó el exmandatario a sus seguidores.

Y agregó: "He de devolverle a mi familia tanto sacrificio estos años, y no es fácil cuando ustedes están del otro lado, ver todo lo que hemos tenido que aguantar, tanto amargado, tanto difamador… que para la gente de bien eso cansa". Y a continuación instó a los "compañeros" a que "cuiden al país" y la "revolución", "a defender lo ganado".