Los funerales de Nelson Mandela
Habrá un gran evento de despedida en el estado FNB de Soweto, el mismo que en 2010 se celebró la final del Mundial. Posteriormente el féretro circulará por las calles de Pretoria y el próximo domingo se realizará el funeral de Estado en la pequeña localidad donde creció.
Los presidentes de EEUU, Barack, Obama; Brasil, Dilma Rousseff; y Cuba, Raúl Castro, figuran entre los oradores que intervendrán el martes en el servicio religioso en memoria de Nelson Mandela. Los tres líderes aparecen en un lista de gobernantes extranjeros que pronunciarán un discurso en la ceremonia, según el programa del acto divulgado por la Presidencia sudafricana.
Es que cerca de un centenar de jefes de Estado y de Gobierno asistirán al servicio religioso oficial en memoria de Mandela, que tendrá lugar en el estadio FNB de Soweto (Johannesburgo), en el que se disputó en 2010 la final del Mundial de Fútbol, que ganó España.
También se prevé la participación de numerosos artistas y figuras internacionales, entre ellos Bono, Annie Lennox y Oprah Winfrey. Por Argentina, Amado Boudou encabeza la comitiva oficial ya que la presidenta, Cristina Fernández, tiene prohibido volar por prescripción médica debido a la neurocirugía a la que fue sometida hace dos meses.
Tras el oficio del martes, el féretro del expresidente desfilará por las calles de Pretoria del 11 al 13 de diciembre, para que los sudafricanos puedan despedirse de Madiba, como se conoce popularmente al exmandatario en su país. También en Pretoria, en la sede del Gobierno de Sudáfrica, quedará abierta la capilla ardiente de Mandela.
El funeral de Estado se celebrará el próximo domingo en la pequeña localidad de Qunu, en el sureste del país, donde Mandela creció y quería ser enterrado. En dicha ciudad será enterrado el próximo domingo pero la estructura solo puede albergar a 5.000 personas por lo que se le pidió a las delegaciones no acudir a este evento.
Nelson Mandela falleció a los 95 años a última hora del pasado jueves en su domicilio de Johannesburgo, después de una larga convalecencia por afecciones