Dos minutos donde todo Israel quedó detenido ante el absoluto respeto y recuerdo de las víctimas judías del plan sistemático de exterminio de Adolf Hitler. 

Minutos antes de las 10.00 hora local el Día de Recuerdo del Holocausto, los automovilistas bajaron de sus vehículos, el transporte público detuvo su recorrido, los ciudadanos dejaron sus actividades para quedarse de pie y en absoluto silencio mientras las sirenas y el recuerdo inundaban todo. 

El ánimo de dedicarle unos minutos de respeto en común a las víctimas tiene como principal propósito el de no olvidar, reflexionar y evitar que se vuelva a repetir. 

En el Museo del Holocausto de Jerusalén (Yad Vashem), se realizó una ceremonia en la que se colocó una ofrenda de flores en el monumento del Levantamiento del Gueto de Varsovia. En el acto participaron. entre otros, el presidente israelí, Reuvén Rivlin; el primer ministro, Benjamín Netanyahu, y miembros de las principales instituciones del Estado y del cuerpo diplomático.

Mientras que en Polonia se lleva a cabo la Marcha de los Vivos, en la que los sobrevivientes del Holocausto junto a más de 10 mil jóvenes caminan en silencio unos  tres kilómetros que separan  os campos de exterminio nazis de Auschwitz y Birkenau.

Por su parte, la Asociación Internacional de Cristianos y Judíos (IFCK) denunció que de los 400.000 sobrevivientes que quedan del Holocausto, un tercio de los que reside en Israel y EE.UU y una cuarta parte de los de la antigua URSS "vive sus últimos días bajo el umbral de la pobreza", sin acceso suficiente a comida, medicina y calefacción.