Estados Unidos espió a los últimos tres presidentes franceses
Según demostraron documentos secretos filtrados por la organización Wikileaks, la Agencia de Seguridad Nacional -el mayor organismo de espionaje de Estados Unidos-, pinchó los teléfonos de los últimos tres presidentes franceses, desde 2006 hasta 2012.
Washington espió a Jacques Chirac, Nicolas Sarkozy y Francois Hollande, los últimos tres mandatarios franceses, país del que es aliado.
Según consigna Wikileaks, la NSA pinchó las comunicaciones de esos tres presidentes, pero también a colaboradores próximos, como diplomáticos o jefes de gabinete, y había reunido los documentos obtenidos de esas escuchas bajo el epígrafe "Espionaje Elíseo".
La noticia se conoce a casi dos años de que el ex espía estadounidense, Edward Snowden, revelara que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés) espió durante años a la canciller alemana, Angela Merkel, y a la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.
Los documentos de WikiLeaks sobre este asunto incluyen cinco informes de análisis de la NSA destinados a los agentes de los servicios secretos estadounidenses, y dos de ellos también a los países con los que Washington tiene una alianza particular en ese terreno: Australia, Canadá, Nueva Zelanda y el Reino Unido.
Los cinco documentos publicados están clasificados como "secretos" y con contenido de "inteligencia especial", y algunos también tienen las siglas que indican que es un "material altamente sensible", producto del "espionaje de redes" y que no debe ser compartida con países extranjeros.
Uno de ellos, fechado el 22 de mayo de 2012 se concentró en una reunión secreta que había mantenido cuatro días antes el entonces recién asumido Hollande y su par alemana, Merkel, para discutir la crisis económica griega.
"Hollande concluyó que la canciller estaba obnubilada por el 'pacto presupuestario' y, sobretodo, por la misma Grecia a la que dejó caer", opinó el autor del informe de análisis de la NSA, en referencia a la intransigencia que demostró Berlín ante los pedidos de Atenas de reestructurar su deuda externa y salir de las políticas de ajuste.
Además, el texto, que se basa en una conversación telefónica entre el mandatario y el entonces primer ministro, Jean-Marc Ayrault, sostuvo que el actual presidente francés que la reunión secreta con Merkel "fue sólo fue un show" ya que ésta última "no cederá nada".
"Resultado: Hollande está muy preocupado por Grecia y por el pueblo griego que podría reaccionar votando a un partido extremista", concluyó el informe.
Sarkozy, el salvador
Unos años antes, el 30 de octubre de 2008, otro informe de análisis de la NSA advirtió que el antecesor de Hollande, Sarkozy, "se veía a si mismo como el único capaz de resolver la crisis financiera mundial".
El texto se basa en varias conversaciones del mandatario galo con fuentes norteamericanas en los primeros meses de la crisis financiera norteamericana, que más tarde terminaría golpeando con fuerza a Europa, especialmente en los países del sur del continente.
"Para él, por primera vez Estados Unidos no reaccionó como un líder a la hora de gestionar una crisis mundial y Francia tomó el mando", destacó el informe de la NSA.
Arde París, arde
La diputada del Frente de Izquierda francés, Raquel Garrido, fue una de las primeras en reaccionar ante la revelación del espionaje masivo contra el Palacio del Elíseo, y desde su cuenta de Twitter pidió que el gobierno "convoque a la embajadora de Estados Unidos" y que "suspenda las negociaciones" comerciales con ese país.
"En síntesis, hacerse respetar", sentenció la diputada de la fuerza liderada por Jean-Luc Mélenchon, que hizo referencia a las negociaciones para sellar un Asociación Trasatlántica de Comercio e Inversión entre Washington y el bloque europeo.
¿Y ahora quién podrá ayudarlos?
Hollande, en tanto, anunció a través de un comunicado oficial que convocó a un Consejo de Defensa para mañana miércoles a primera hora de la mañana para "evaluar la naturaleza" de estas informaciones y "sacar conclusiones útiles".
Sin embargo, le será difícil al Ejecutivo francés, al menos al ex presidente Sarkozy, ya que otro de los documentos publicados hoy y fechado el 24 de marzo de 2010, demuestra que el ex mandatario sabía que Estados Unidos lo espiaba.
Este informe se basa en una conversación entre el entonces embajador francés en Washington, Pierre Vimont, y el principal consejero diplomático de Sarkozy, Jean-David Levitte, sobre la agenda que impulsaría el entonces presidente durante su próxima visita a Barack Obama en esa ciudad estadounidense.
"El presidente expresara su frustración por la decisión de Washington de desandar el acuerdo de cooperación bilateral de inteligencia y tiene la intención de seguir insistiendo para que se cumpla.
Tanto Vimont como Levitte entiende que el principal punto de fricción es que Estados Unidos quiere seguir espiando a Francia", explicó el texto.
Según el diario Libération, la NSA interceptó llamadas telefónicas hechas desde dentro del Palacio del Elíseo durante más de seis años a través de una unidad especial de espionaje, instalada en la Plaza de la Concordia, entre los jardines de las Tullerías y los Campos Elíseos.
Además de ser uno de los lugares favoritos de los turistas en París, esta ubicación también es estratégica porque se encuentra a apenas unos cientos de metros del Palacio Presidencial, de la Asamblea Nacional, de los ministerios del Interior, de Justicia y la Cancillería, y de varias embajadas, incluida la estadounidense.
Se trata de una antena especial, que según un documento secreto publicado en el pasado por el semanario alemán Der Spiegel, Estados Unidos ha colocado en 80 ciudades del mundo, entre ellas 19 en Europa, en ciudades como Berlín, Ginebra, Madrid, Estocolmo, Viena y Varsovia.