Donald Trump empieza a moderar sus promesas de campaña en un clima de tensión
El presidente electo, que espera asumir el próximo 20 de enero, se tomó un descanso por el Día de Acción de Gracias mientras se prepara para la transición de una manera más moderada con respecto a su campaña política.
Donald Trump eligió pasar el Día de Acción de Gracias con su familia en su mansión Mar-a-Lago, en Florida, rodeado de un fuerte despliegue de seguridad.
El republicano utilizó su cuenta de Twitter para anunciar "progresos" en evitar que la compañía de equipos de aire acondicionado Carrier traslade su fábrica de Indiana a México. “Estoy trabajando duro, hasta en Acción de Gracias, para que Carrier se quede en Estados Unidos”, tuiteó.
Durante la campaña presidencial había trascendido que el equipo político le había sugerido a Trump no utilizar las redes sociales para expresar sus ideas radicales, lo que generó la burla de los demócratas.
Desde el pasado 8 de noviembre, son muchos los que señalan que el magnate "moderó su discurso" e incluso se mostró empático con Hillary Clinton al comunicar que no pensaba incitar investigaciones en su contra.
Luego de reunirse con Obama, Trump afirmó que estaba abierto a aprobar una versión “modificada” de la ley de acceso a la sanidad- conocida como Obamacare- que primero había calificado como un “desastre total”. E incluso cambió su postura sobre el actual presidente de llamarlo "creador del Estado Islámico" a "hombre bueno". También moderó su posición respecto al acuerdo de París sobre el cambio climático aunque no así sobre el acuerdo Trans-Pacífico.
Fue el propio ex secretario de Estado, Henry Kissinger, en una entrevista con CNN el que advirtió que es "contraproducente" exigir que las administraciones presidenciales sigan al pie de la letra todo lo prometido en campaña que muchas veces se reduce a un eslogan.
Trump también moderó su cruce con los medios, como lo manifestó en su encuentro con los directivos de The New York Times, diario al que calificó como "joya".
Otro de sus ejes polémicos es el tema de la inmigración, mientras aseguraba “Voy a construir un muro y haré que México lo pague”, y llamaba a los mexicanos "violadores", en una reciente entrevista con el Times planteó: “Estoy convencido de que necesitamos una reforma migratoria”. Tampoco se volvió a referir sobre los musulmanes a los que, en campaña, había señalado que les iba a prohibir la entrada a Estados Unidos.