No es la primera vez que desde las oficinas de la Santa Sede del Vaticano se emite un comunicado para expresar la preocupación de la Iglesia ante la política inmigratoria del actual presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. 

"Ciertamente hay preocupación. Nosotros somos mensajeros de otra cultura, la de la apertura", aseveró este miércoles Angelo Becciu, Sustituto de la Secretaría de Estado del Vaticano y agregó que se trata de una cultura distinta a la de una "globalización mal gestionada".

"El Papa insiste en la capacidad de integrar a quien llega, a quien viene, a nuestra sociedad y a nuestra cultura. Somos constructores de puentes, no de muros", planteó Becciu a la Radio Vaticana, parafraseando la expresión clásica de Francisco que planteó: "quien construye muros no es cristiano".

Y agregó: "Todos los cristianos deberían ser fuertes en la reafirmación de este mensaje". En el día de ayer,  el diario oficial vaticano L'Osservatore Romano opinó que el veto del presidente Donald Trump al ingreso de musulmanes y refugiados a Estados Unidos era una forma de menoscabar el respeto histórico de ese país a los derechos humanos.