Arresto domiciliario para exarzobispo condenado por abuso
Tras un juicio canónico, el arzobispo Josef Wesolowski fue despojado primero de su calidad de sacerdote, y ahora, debido a los fuertes testimonios en su contra durante el proceso penal, el fiscal ordenó su arresto domiciliario.
En junio pasado y luego de ser declarado culpable por pederastia en el primer juicio canónico celebrado en el Vaticano por este delito, Josef Wesolowski, de 66 años, era obligado a abandonar el sacerdocio y continuar como laico.
No era un hecho menor, tratándose de quién es: Wesolowski era arzobispo y, desde 2008, nuncio apostólico en República Dominicana, donde había abusado sexualmente de menores de edad, hechos por los que fue juzgado en el Vaticano dado que tiene la ciudadanía de la Santa Sede.
Ahora, el pedófilo fue detenido y arrestado en su vivienda del Vaticano mientras es juzgado penalmente luego de ser declarado culpable en el juicio canónico que abrió contra él la Congregación para la Doctrina de la Fe.
Ante la gravedad de los testimonios que pesan contra él, el fiscal que lleva adelante el proceso penal dio la orden y a eso de las 17 horas del martes, un grupo de agentes de Gendarmería vaticana lo arrestó, le comunicó oficialmente las graves imputaciones que pesan contra él y le prohíben salir de su vivienda.
Según los testimonios brindados durante el proceso penal, Wesolowski habría abusado sexualmente de varios menores en Republica Dominicana a cambio de dinero: un diácono, excolaborador suyo, declaró haberle procurado chicos para que mantuviera con ellos relaciones sexuales.
"La iniciativa llevada a cabo por los órganos judiciales del Estado (vaticano) es consecuente con la voluntad expresada por el Papa, para que un caso así de grave y delicado sea afrontado sin retrasos, con el justo y necesario rigor, con la asunción plena de la responsabilidad por parte de las instituciones de la Santa Sede", indicó al respecto Federico Lombardi, el portavoz del Vaticano.
El ahora exsacerdote fue destituido por Francisco como nuncio apostólico en República Dominicana en agosto de 2013, después de que el programa de investigación de una cadena de televisión revelara que el prelado pagaba a chicos a cambio de sexo y que acudía asiduamente a una zona de Santo Domingo conocida por prostitución de menores.
Cuando la Fiscalía General de ese país le acusó formalmente de abusar sexuales de adolescentes de escasos recursos económicos, Wesolowski fue inmediatamente trasladado a Roma, por orden de la Santa Sede, para ser juzgado en un proceso canónico y ahora en uno penal.
Ello despertó en República Dominicana la sospecha de que dicho traslado habría sido una maniobra para proteger al cura pedófilo, evitando así que fuera a la cárcel en ese país, según indicaron algunos medios locales.