300 mujeres de Hollywood crean un fondo para ayudar a víctimas de acoso sexual
Actrices, directoras y productoras de una de las industrias cinematográficas más grandes del mundo reunieron varios millones de dólares para crear un fondo de ayuda a quienes sufrieron algún tipo de violencia de género.
El colectivo, llamado Time’s Up Now (El tiempo se acabó) anunció un ambicioso plan de acción contra el acoso sexual en la meca del cine y en todo Estados Unidos para ayudar a mujeres de cualquier estrato social que hayan sido o son víctimas de violencia de género.
Es un nuevo paso, tras la autoconvocatoria que se se hizo con el movimiento #metoo (yo también), que desde las redes sociales sirve como forma de denuncia en diversas esferas laborales, sociales e íntimas.
La iniciativa, coordinada por varias organizaciones sociales, busca poner fin a la cultura de abusos que sufren millones de mujeres todos los días.
“Debe terminar la lucha de las mujeres para entrar, para escalar en los rangos y simplemente para ser escuchadas y consideradas en puestos de trabajo dominados por hombres. Se ha acabado el tiempo para este monopolio impenetrable”, reza una carta abierta publicada ayer en los diarios The New York Times y La Opinión.
Algunas de las firmantes y promotoras de la iniciativa son las actrices Ashley Judd (que denunció los abusos de Harvey Weinstein, el poderoso productor de Hollywood que luego desencadenó decenas de testimonios de otras mujeres abusadas), Eva Longoria, America Ferrera, Natalie Portman, Rashida Jones, Emma Stone, Kerry Washington y Reese Witherspoon; entre otras.
También respaldan esta iniciativa Donna Langley, presidenta de Universal Pictures; Shonda Rhimes, productora de las series televisivas Anatomía de Grey y Scandal; y Tina Tchen, que fue jefa de gabinete de la ex primera dama Michelle Obama.
Time’s Up Now cuenta además del fondo legal un espacio abierto a donaciones para ayudar a mujeres con pocos recursos a costear las denuncias por acoso. También promueve un proyecto de ley que penalice a las compañías que toleren abusos recurrentes de sus empleados, y otro que desaliente el uso de acuerdos judiciales secretos para acallar denuncias.
Además de la búsqueda de paridad de género- con vistas a 2020- en todos los sectores de la industria del entretenimiento.