Luis Ventura salió con los tapones de punta para confrontar con Beto Casella y Jorge Lanata, quienes insuaron que el chimentero tendría un hijo no reconocido.

Ventura puso los puntos sobre las íes al señalar que "es una operación porque me quieren ver hincado y genuflexo". Y agregó: "La identidad no se la voy a sacar a nadie que sea de mi sangre", "si hablan de ADN tendrían que ir a buscar en las empresas que trabajan" (refiriéndose a la causa de los hijos de Ernestina de Noble).

Además trató de caraduras a los periodistas señalando que Beto Casella abusaba de Maglietti y que Jorge Lanata lo amenazó de muerte.

Una pelea que parece que va a extenderse en el tiempo.