Desde la pantalla del Grupo, la intención de mantener la asociación de la pelirroja periodista con las causas que investigan al vicepresidente, parece un manotazo de ahogado y un sin sentido, a esta altura.

Oliván manipuló desde su discurso y agrupó causas, que nada tienen que ver con la ex directora de la revista Minga. La apuntada respondió por cortesía hasta dónde quería, puesto que un periodista debe informar, pero jamás creer que tiene el poder de la justicia para impartirla desde un set televisivo.